Ganas de huir de todo, ganas de marcharme y dejarlos aquí a ellos solos, para que aprendan a vivir sin mi, para que se den cuenta que no pueden vivir esperando que yo siempre les solucione los problemas o quedarme con los mios y los suyos mientras ellos siguen su camino, lo malo es que ni siquiera felices, siguen su camino sin dar las gracias, sin ponerse a pensar lo que he sacrificado por ellos y además enfadados con el mundo.
Hoy he empezado un nuevo proyecto, hoy empieza el cambio, no se si podré llegar a buen puerto porque se de antemano que la travesía será muy dura y que voy a tener que librar muchas batallas, pero lo intentare y una vez que haya salido de puerto se que no habrá marcha atrás, se que o llego a mi destino o naufragare.
Mi viaje a Itaca, primero tengo que quitar el lastre que impide a mi barca navegar, lo iré haciendo poco a poco y estaré muy atenta a la dirección del viento para que se llene las velas y pueda coger el rumbo correcto.
No puedo cambiar sus malas artes, sus desganas, sus celos, sus odios, pero si que puedo intentar que no hagan desviar mi rumbo. Se que habrá motines y a algunos quizá tenga que abandonarlos a mitad de la travesía, pero espero tener la lucidez suficiente para hacerlo en el momento y el lugar adecuado.
Los sentimientos son los únicos que pueden impedir mi llegada a buen puerto pero intentaré controlarlos lo mejor que pueda y solo hay una manera de conseguirlo hacer que el viaje aunque duro sea divertido y se noten poco a poco sus frutos.
Se que lo conseguiré.
3 comentarios:
ánimo, serenidad y determinación,
y una pizca de suerte,
Gracias, pero no se si sere capaz, el ánimo y la serenidad creo que no me faltan pero la determinación y la suerte...uffff
pensando en el destino, no te olvides de disfrutar del camino...
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